El pénfigo vulgar es una rara enfermedad crónica de la piel con ampollas y la forma más común de pénfigo. Se clasifica como una reacción de hipersensibilidad de tipo II, con la formación de anticuerpos contra los desmosomas, componentes de la piel que funcionan para mantener ciertas capas de piel unidas entre sí. A medida que los desmosomas son atacados, las capas de piel se separan y el cuadro clínico se asemeja a una ampolla. Con el tiempo, la afección inevitablemente progresa sin tratamiento: las lesiones aumentan de tamaño y distribución por todo el cuerpo, comportándose fisiológicamente como una quemadura grave. Antes de la llegada de los tratamientos modernos, la mortalidad por la enfermedad se acercaba al 90%. Hoy en día, la tasa de mortalidad con tratamiento está entre el 5 y el 15%.