El melanoma, también conocido como melanoma maligno, es un tipo de cáncer que se desarrolla a partir de células que contienen pigmentos conocidas como melanocitos. Los melanomas suelen aparecer en la piel, pero rara vez pueden aparecer en la boca, los intestinos o los ojos. En las mujeres aparecen con mayor frecuencia en las piernas, mientras que en los hombres son más comunes en la espalda. A veces se desarrollan a partir de un lunar con cambios preocupantes que incluyen un aumento de tamaño, bordes irregulares y cambios de color, picazón o rotura de la piel. La causa principal del melanoma es la exposición a la luz ultravioleta (UV) en personas con niveles bajos de pigmento en la piel. La luz ultravioleta puede provenir del sol o de otras fuentes, como dispositivos de bronceado. Alrededor del 25% se desarrolla a partir de lunares. Las personas con muchos lunares, antecedentes de familiares afectados y que tienen una función inmunológica deficiente corren un mayor riesgo. Varios defectos genéticos raros, como el xeroderma pigmentoso, también aumentan el riesgo. El diagnóstico se realiza mediante biopsia de cualquier lesión cutánea preocupante. Usar protector solar y evitar la luz ultravioleta puede prevenir el melanoma.