Una gammagrafía ósea es una prueba de imágenes nucleares que ayuda a diagnosticar y realizar un seguimiento de varios tipos de enfermedades óseas. La gammagrafía ósea con medicina nuclear muestra los efectos de una lesión o enfermedad como cáncer o infección en los huesos. Se inyecta un material radiactivo (radiofármaco) en una vena, se adhiere a los huesos y es detectado por una cámara especial (cámara gamma) que toma imágenes o fotografías que muestran cómo funcionan los huesos.
La gammagrafía ósea con medicina nuclear se utiliza para evaluar el origen del dolor óseo; por ejemplo, dolor de pie o cadera y para encontrar otras imágenes de diagnóstico o resultados de laboratorio anormales. Por lo general, se sugiere la gammagrafía ósea de medicina nuclear para encontrar fracturas, fracturas por estrés y calambres en las piernas. La gammagrafía ósea con medicina nuclear también se utiliza para analizar la osteomielitis (infección del hueso), la celulitis (infección de la piel) o para evaluar la respuesta al tratamiento (por ejemplo, antibióticos).