Durante una partida de ajedrez, la energía necesaria se obtiene primero instantáneamente del ATP y del fosfato de creatina, luego, unos segundos después, de los depósitos de glucógeno en el cerebro, el glucógeno, el músculo y el hígado y, finalmente, 1-2 horas más tarde, del tejido adiposo. La oxidación anaeróbica del derivado de la glucosa a partir del glucógeno proporciona energía 6 veces más rápido que la oxidación aeróbica de la glucosa y la oxidación de los ácidos grasos; correspondientemente, la actividad mental puede realizarse también 6 veces más rápido siempre que haya glucógeno disponible.
El perfil mental de los ajedrecistas se correlaciona con procesos cerebrales como la atención, la solución de conflictos, la memoria,
motivación y reconocimiento, que juntos constituyen una experiencia específica en el dominio del ajedrez.
Un jugador de ajedrez puede competir mejor cuando a) realiza ejercicio físico regularmente para competir en torneos de ajedrez extenuantes y estimular la cognición mental, b) se acumula glucógeno súper compensado en el cerebro, los músculos y el hígado mediante la nutrición y las actividades físicas y mentales correspondientes, y c) hay una disposición mental activa disponible para tareas cerebrales complejas durante el ajedrez mediante esquemas de tratamiento complementarios, por ejemplo, mejora cognitiva (EC) mediante entrenamiento de ajedrez con tableros de ajedrez, libros de ajedrez, construcción de imágenes de ajedrez, observación visual de partidas de ajedrez, entrenamiento vocacional con ajedrez, entrenamiento metacognitivo y, además, estrés físico ligero regular.
Una mejora ilícita del rendimiento cerebral para jugar al ajedrez se puede lograr mediante varias medidas:
1. Aumento del aporte de O2 mediante terapia con eritropoyetina (EPO) para torneos de ajedrez en grandes altitudes y para
Jugadores de ajedrez con enfermedades pulmonares
2. Aumento del glucógeno corporal mediante terapia con insulina.
3. estimulación mental por cafeína
Los esteroides anabólicos, las anfetaminas, la nicotina y la cocaína no tienen efectos probados sobre la calidad del juego de ajedrez. Muchas hormonas esteroides y proteohormonas como el cortisol, la testosterona, la ACTH, la EPO, la GH, la hCG, el IGF-I, la insulina y la LH tienen efectos positivos sobre el desarrollo cerebral y la cognición solo cuando están presentes en concentraciones naturales durante el desarrollo del cerebro. Los preparados farmacéuticos muestran efectos positivos solo en niveles basales bajos de cognición. En concentraciones elevadas, estas hormonas tienen efectos negativos sobre la cognición mental.
Los fármacos que estimulan la electroencefalografía sólo tienen efectos en personas con un nivel cognitivo basal bajo. En personas normales, la electroencefalografía sigue estando por debajo de la significación clínica.
El uso regular no médico de esteroides y proteohormonas en concentraciones elevadas y de medicamentos CE también debe considerar numerosos efectos secundarios que van desde simples trastornos metabólicos hasta problemas cardíacos, deterioro cognitivo, tumorogénesis y muerte súbita.