Vander Slagmolen G, van Hellemondt FJ y Wielders JPM
Antecedentes: La vitamina D es bien conocida por su papel en la homeostasis del calcio y el metabolismo óseo. Además, las deficiencias de 25 (OH) vitamina D3 (25OHD3) se correlacionan con el dolor y la debilidad muscular, por lo que existe un creciente interés en los niveles óptimos de 25OHD3 para los atletas. Investigamos la prevalencia de la deficiencia de 25OHD3 y la variación étnica en las concentraciones de 25(OH)D entre los jugadores de fútbol profesionales en la temporada de invierno. Métodos: Encuesta transversal de 87 jugadores de fútbol profesionales (de 18 a 35 años) de un club de fútbol belga y dos de primera división holandeses. Se recogieron muestras de sangre desde octubre de 2009 hasta marzo de 2010. La 25OHD3 se midió utilizando un inmunoensayo de electroquimioluminiscencia (Roche), intervalo de referencia: 50-130 nmol/L. Resultados: Para 47 jugadores (54%) del grupo total, la 25OHD3 fue <50 nmol/L. En 16 sujetos (18,4%) se encontraron concentraciones <30 nmol/L. Todos los jugadores negros (n=20) tenían niveles sanguíneos <50 nmol/L y 9/20 <30 nmol/L. En los jugadores latinoamericanos, 10 de 15 tenían 25OHD3 <50 nmol/L y 5/15 <30 nmol/L. En los jugadores caucásicos, 21/52 jugadores tenían <50 nmol/L y 2/52 <30 nmol/L. Conclusión: El nivel de vitamina D en los jugadores profesionales de fútbol al final del verano y durante la temporada de invierno en Europa Occidental es obviamente inferior al óptimo, para los caucásicos el 40% tenían deficiencia (<50 nmol/L), pero todos los atletas negros tenían deficiencia o deficiencia severa (<30). Especialmente los futbolistas de piel oscura, así como otros deportistas, pueden mejorar su rendimiento físico manteniendo su nivel de 25OHD3 por encima de 75 nmol/L durante todo el año.
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