Larry Holmes Jr., Leslie Stalnaker, Joseph Casini, Isabel Morgan, Valescia John y Kirk Dabney
El trastorno del espectro autista (TEA) tiende a coexistir con la epilepsia, pero no está claro si el TEA predispone a la epilepsia o viceversa. Utilizando la Encuesta Nacional de Salud Infantil (2012), evaluamos la relación entre el TEA y la epilepsia como coexistencia de enfermedades, examinamos la variabilidad racial/étnica en la misma y los marcadores de riesgo. En comparación con los blancos, los negros/afroamericanos tenían un 54% menos de probabilidades de ser diagnosticados con TEA, razón de probabilidades de prevalencia (POR) = 0,46, IC del 95%, 0,34-0,63. En cambio, en comparación con los blancos, los negros/afroamericanos tenían un 56% más de probabilidades de ser diagnosticados con epilepsia, POR = 1,56, IC del 95%, 1,24-1,96. De manera similar, se observaron diferencias raciales en la coocurrencia, con un riesgo significativamente mayor del 20% entre los negros en relación con los blancos, POR=1,20, p<0,0001. El seguro público, la pobreza, la educación materna y las discapacidades intelectuales fueron los dos predictores más potentes de la coocurrencia de TEA y epilepsia. Después de controlar la edad, el sexo, la educación de los padres, la cobertura del seguro, el nivel federal de pobreza y la discapacidad intelectual, no persistieron diferencias raciales significativas, pero los negros tenían un 74% menos de probabilidades de informar la coocurrencia de TEA y epilepsia en relación con los blancos, aPOR=0,26, p=0,23. En resumen, existen disparidades raciales en la prevalencia de coocurrencia de TEA y epilepsia, que no persistieron después de controlar los posibles factores de confusión; mientras que el seguro público, la educación materna, la pobreza y las discapacidades intelectuales siguen siendo predictores potentes de la coocurrencia. Estos hallazgos sugieren un optimismo cauteloso al evaluar la dirección causal en la coocurrencia de TEA y epilepsia entre los niños.