Seamy Grace* y Drake D. Marison
La función y disfunción intestinal es una respuesta misteriosa vinculada a la emoción, la vergüenza y la pena. Se suponía que la percepción de los síntomas gastrointestinales tenía una causa diferente en cada población. Por ejemplo, un grupo de personas los consideraba alucinaciones, mientras que otro grupo de personas con un nivel socioeconómico más bajo no reconocía las características clínicas gastrointestinales como síntomas. Sin embargo, estudios modernos sugieren que la dieta, la depresión, el estrés o la ansiedad pueden desencadenar mutuamente los síntomas gastrointestinales, justificados por la investigación fisiológica, conductual y psicosocial del trastorno gastrointestinal funcional (TFGI). Otros estudios que utilizan la emoción como estrés en sujetos sanos y sujetos con pacientes con SII sugieren que el estado de ánimo se correlaciona con la motilidad intestinal. Por ejemplo, se encontró que el aumento y la disminución de la motilidad intestinal estaban asociados con estados de agresión y sensación de impotencia respectivamente. Sin embargo, estos estudios estaban limitados por métodos de medición rudimentarios y un enfoque de análisis unidireccional.
Anny Anderson* y Seamy Grace
La enfermedad de Alzheimer es una afección neurológica que empeora con el tiempo a pesar de tener una progresión lenta. Se cree que es la raíz del 60-70% de los casos de demencia. El signo inicial más típico es la dificultad para recordar eventos recientes. Problemas de lenguaje, desorientación (incluyendo perderse fácilmente), cambios de humor, pérdida de deseo, autoabandono y trastornos de conducta son signos potenciales de progresión de la enfermedad. Cuando la salud de una persona comienza a deteriorarse, con frecuencia se aísla de amigos y familiares. Con el tiempo, las capacidades del cuerpo disminuyen, lo que finalmente resulta en la muerte. A pesar de que el ritmo de avance varía, la expectativa de vida típica después del diagnóstico es de tres a nueve años.