Tadashi Yagi y Yoshio Itaba
La pandemia de la enfermedad por coronavirus 2019 (COVID-19) ha dado lugar a la necesidad de implementar ciertas medidas, como la declaración del estado de emergencia en Japón, para prevenir la propagación de la infección. Esto ha provocado daños médicos generalizados (muerte, enfermedad grave y secuelas) y daños económicos (quiebra, cierre de empresas y desempleo). Las personas también han desarrollado un miedo a infectarse con la enfermedad. Las pérdidas económicas han provocado efectos negativos como un aumento de la violencia doméstica, una mayor prevalencia de la depresión, un estancamiento educativo como resultado del cierre de escuelas y la soledad debido a las interacciones cara a cara limitadas. En este estudio, estimamos los costos sociales de la pandemia de COVID-19 y aclaramos la naturaleza de los cambios de comportamiento de las personas. Esta investigación es importante para evaluar las políticas que se han implementado hasta ahora para combatir las enfermedades infecciosas. El estudio se centró en la relación entre los cambios de comportamiento y el reconocimiento del costo social. Se planteó la hipótesis de que el cambio de comportamiento es más frecuente entre las personas que no reconocen el costo social de las medidas implementadas en respuesta a la pandemia de COVID-19. De esta manera, aclaramos los factores que determinan la evaluación de las políticas y los que determinan los cambios sociales de conciencia antes mencionados que sirven de base para los cambios de comportamiento basados ??en el apoyo o la desaprobación de la estrategia sueca.
María Zeayter
Antes de la acreditación, los hospitales del Líbano adoptaban diferentes protocolos clínicos, lo que ha dado lugar a diferencias en los tratamientos médicos prestados, a lo que se suma la falta de políticas y procedimientos transparentes a nivel administrativo, financiero y clínico. En mayo de 2000, cuando la acreditación comenzó su labor estableciendo normas que se debían aplicar en cada departamento para obtener mejores resultados, la calidad se volvió cada vez más crucial. Pero aún tenemos una escala y una brecha de calidad eliminadas de diferentes hospitales, especialmente en cada departamento. Por lo tanto, mi tema se centró en la importancia de la calidad en el sector de la atención sanitaria y el papel crucial de la integración entre los diferentes departamentos del hospital para garantizar una mejor calidad, seguridad, rendimiento, eficiencia y satisfacción (dimensiones de calidad). Muchos problemas, como la escasez de personal, la inflación y la demanda de servicios, han intensificado el llamamiento a un uso más eficiente y eficaz de los recursos a través de un sistema integrado. Se considera ampliamente que los sistemas sanitarios integrados ofrecen un rendimiento superior en términos de calidad y seguridad como resultado de una comunicación eficaz y protocolos estandarizados, pero estos resultados no se han demostrado plenamente. A pesar del creciente entusiasmo y el atractivo resultado de la integración, la información relacionada con la aplicación y evaluación de iniciativas relacionadas con la integración está dispersa y no es fácilmente accesible. Es necesario buscar y aplicar los conocimientos actuales sobre la integración de los sistemas de salud para promover una prestación de servicios eficaz y centrarse más en todas las dimensiones de calidad que conducen a mejores resultados en el sector de la atención sanitaria. Por eso, todos los hospitales deben centrarse en la calidad y sus diferentes dimensiones, como la comunicación, la seguridad y la estructura organizativa, y deben conocer la importancia de la integración entre sus departamentos.