Vassileios Drosos1, Nicole Rickert2, Anne Marie Augustin2, Annette Thurner2, Dejan Radakovic1 y Ivan Aleksic1*
La mayoría de las lesiones de los grandes vasos torácicos son causadas por traumatismos penetrantes, pero también pueden ocurrir después de un traumatismo cerrado. La lesión combinada de la vena ácigos y la aorta torácica descendente es poco frecuente. Una mujer de 56 años sufrió un accidente automovilístico. La tomografía computarizada (TC) reveló una rotura de la vena ácigos con fracturas costales seriadas bilaterales. La vena ácigos se ligó con sutura. La TC repetida mostró un nuevo hematoma intramural de la aorta descendente que causaba compresión del tronco celíaco. Se implantó un stent aórtico Terumo Relay® por vía transfemoral. La TC repetida temprana puede detectar lesiones vasculares adicionales después de un traumatismo torácico importante y permite el tratamiento combinado abierto y endovascular de dichas lesiones.
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