Ali Dehghanifirouzabadi y Mina Qobadi
Antecedentes: Aunque las infecciones prenatales por el virus de inmunodeficiencia humana (VIH) están disminuyendo en los Estados Unidos, muchas mujeres en edad fértil desconocen su estado serológico. La realización de pruebas de detección del VIH antes o durante las primeras etapas del embarazo es un primer paso fundamental para reducir el riesgo de transmisión de madre a hijo.
Objetivo: El objetivo de este estudio fue estimar la prevalencia de mujeres con estado de VIH desconocido y explorar las asociaciones entre las características sociodemográficas, el acceso a la atención médica y las pruebas de VIH entre mujeres embarazadas en los Estados Unidos.
Metodología: Se utilizaron datos del Sistema de Vigilancia de Factores de Riesgo Conductuales (BRFSS, por sus siglas en inglés) de 2013 para calcular estimaciones de la prevalencia de la realización de pruebas de VIH entre mujeres embarazadas en los Estados Unidos (n = 2722). Las mujeres embarazadas que nunca se habían realizado una prueba de VIH o que no se habían realizado la prueba de VIH durante el año anterior se consideraron mujeres embarazadas con estado serológico desconocido. Se realizaron estadísticas descriptivas, pruebas de chi-cuadrado y regresión logística utilizando los procedimientos de SAS Proc Survey, para tener en cuenta el diseño complejo de encuestas multietapa del BRFSS y los pesos de la muestra.
Resultados: En general, el 30,3% de las mujeres embarazadas nunca se habían hecho la prueba del VIH y, entre ellas, solo el 24% se había hecho la prueba del VIH el año anterior. Las mujeres blancas no hispanas (p<0,0001), las de 18 a 24 años (p=0,02), las casadas (p=0,02), las que no tenían seguro (p<0,001) y las que no tenían médico personal (p=0,02) tenían tasas significativamente más altas de no haberse hecho la prueba del VIH en la vida. Las mujeres embarazadas de 35 a 44 años (39,2%), las que tenían un ingreso anual de 50.000 dólares o más (32,9%) y las que estaban casadas (31,4%) tenían una tasa significativamente más alta de no haberse hecho la prueba del VIH el año anterior . Las regresiones logísticas múltiples mostraron que la probabilidad de nunca haberse hecho la prueba del VIH era mayor entre los blancos no hispanos (aOR=2,1; IC del 95%:1,3–3,4; referencia=otras razas), las mujeres casadas (aOR=1,7; IC del 95%:1,1–2,3; referencia=solteras), las de 18 a 24 años (aOR=2,1; IC del 95%:1,4–3,3; referencia=35 años o más) y las que no tenían seguro (aOR=2,2; IC del 95%:1,3–3,7; referencia=cubiertas por el seguro). Entre las que alguna vez se habían hecho la prueba del VIH, las mujeres casadas tenían dos veces más probabilidades de no haberse hecho la prueba del VIH el año anterior que las mujeres solteras (aOR=2,0; IC del 95%:1,3–3,1; referencia=solteras); Mientras que las mujeres más jóvenes (18-24 años) tenían menos probabilidades de no haberse realizado pruebas de VIH en el último año (ORa=0,3; IC del 95%: 0,2-0,7 referencia=35-44 años).
Conclusión: Nuestros hallazgos indicaron que la prevalencia de estado serológico desconocido (de vida o reciente) fue alta, lo que generó inquietudes sobre los enfoques de las pruebas prenatales del VIH en los Estados Unidos. La probabilidad de nunca haberse hecho la prueba del VIH fue mayor entre las mujeres blancas no hispanas, las mujeres casadas y más jóvenes (de 18 a 24 años) y las que no tenían seguro después de controlar las covariables. Además, los resultados mostraron que las mujeres casadas tenían una mayor probabilidad de no haberse hecho la prueba del VIH recientemente, mientras que las mujeres más jóvenes (de 18 a 24 años) tenían menos probabilidades de no haberse hecho la prueba del VIH el año anterior. Nuestros hallazgos resaltan la necesidad de continuar y fortalecer los esfuerzos para prevenir la transmisión perinatal del VIH en los Estados Unidos mediante una mayor concienciación sobre la realización de la prueba del VIH. Los proveedores de atención médica deben recomendar la prueba del VIH a todas las mujeres en edad fértil, independientemente de las características sociodemográficas, para reducir este modo de transmisión.
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