Yorran Hardman Araújo Montenegro, Anderson dos Santos Ramos y Geilza Carla de Lima Silva
El cáncer es una enfermedad heterogénea, resultado de la combinación específica de cambios genéticos y epigenéticos en las células somáticas, ocurriendo como un proceso acumulativo a lo largo de la vida del organismo humano. El sistema inmune está especializado para actuar en defensa de nuestro cuerpo, con potencial de destrucción específica sin toxicidad para el tejido normal. En el contexto tumoral, este sistema actúa tanto por acciones de reconocimiento e inhibición del desarrollo, como en el control tumoral a través de la interacción con células promotoras de la oncogénesis. Como criterio para realizar una revisión sistemática de la literatura entendiendo la relevancia de la interacción sistémico-inmune y el cáncer, seleccionamos artículos en idioma inglés, con un diseño descriptivo y/o experimental. El reconocimiento de un tumor puede lograrse mediante la identificación de antígenos oncofetales, proteínas con conformación estructural alterada, expresión anormal de carbohidratos de superficie, así como expresión aumentada de proteínas que se encuentran en células normales. Ante este reconocimiento, las respuestas antitumorales pueden ser de naturaleza celular y/o humoral, donde las células del sistema inmune actúan mediante actividad citotóxica, o liberando moléculas efectoras. Como todo esfuerzo inmunológico, las células tumorales son capaces de evadir el sistema inmunológico a través de mutaciones en moléculas clave, pérdida de la antigenicidad e inmunogenicidad, cambios en los patrones de carbohidratos, actividad inmunosupresora del microambiente tumoral, entre otros. Comprender las relaciones entre las células inmunes y las células cancerosas es esencial para entender la dinámica del cáncer.
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