Estefanía G. Piedrahita, María AG Abad, Ángela ML García y José DS Ramírez
Los linfomas cutáneos de células T forman parte de los linfomas no Hodgkin que afectan principalmente la piel pero pueden comprometer sangre, ganglios linfáticos y otros
órganos internos en pacientes con enfermedad avanzada. Existen muchos tipos de linfoma cutáneo de células T. Los dos subtipos principales son la micosis
fungoide (MF) y el síndrome de Sézary (SS). El diagnóstico de este último es un reto debido a los hallazgos clínicos y algunos histológicos, que
los hace similares a las dermatosis benignas. Se presenta el caso clínico de un paciente con diagnóstico inicial de eritrodermia asociada a psoriasis con
compromiso articular, luego se reevalúa la etiología y
se confirma un linfoma T ganglionar extracutáneo con compromiso de médula ósea (síndrome de Sézary).
Comparte este artículo