Ashenafi Belete, Tafesse Lamaro y Andualem Henok
Antecedentes: En Etiopía, sin embargo, las enfermeras misioneras suecas comenzaron a ejercer la enfermería en 1895, el crecimiento profesional, incluida una mayor contribución a la investigación en el campo de la profesión, no fue apreciable y la imagen de la profesión no es clara y resulta frustrante para quienes se incorporan a la profesión y necesitan continuar como carrera.
Objetivo: Evaluar las actitudes de los enfermeros y los profesionales de la salud no enfermeros hacia la profesión de enfermería entre los trabajadores del hospital general de Mizan-Aman. Método: Se llevó a cabo un diseño de estudio transversal entre los profesionales de la salud que trabajan en el Hospital General de Mizan-Aman sobre sus actitudes hacia la profesión de enfermería. Todos los profesionales de la salud del Hospital General de Mizan-Aman que cumplieron con los criterios de inclusión fueron incluidos en el estudio. Se utilizó un cuestionario autoadministrado estructurado para generar datos y el 5% de los cuestionarios se probaron previamente en el centro de salud con profesionales de la salud. Los datos se ingresaron en Epidata 3.1 y se exportaron a SPSS versión 17 para el análisis estadístico.
Resultado: Este estudio reveló que 64 (50%) de los encuestados mostraron una actitud favorable hacia la profesión de enfermería y 64 (50%) mostraron una actitud desfavorable. Cuando se evaluó el porcentaje dentro de una categoría, la mayoría 4 (63,6%) de los médicos mostraron una actitud desfavorable, seguidos por las enfermeras 49,4%, pero 14 (60,9%) de la categoría de no enfermeras que no eran médicos mostraron una actitud favorable. La mayoría, 79 (61,8%) creía que las enfermeras tienen una contribución importante para un buen resultado del paciente y 13 (10,2%) de los encuestados percibían a las enfermeras que trabajaban con ellos como incompetentes.
Conclusión: Aunque la mayoría (61,8%) de los encuestados creía que la enfermería contribuía a obtener buenos resultados para los pacientes, solo 64 (50%) de ellos mostraron una actitud favorable hacia la profesión de enfermería. El principal impacto de este considerable porcentaje de actitud desfavorable de los encuestados se debe a que afecta la calidad de la atención que reciben los pacientes. Por lo tanto, se deben realizar esfuerzos continuos para elevar la moral de las enfermeras y trabajar para establecer el respeto y la valoración de las relaciones interprofesionales entre el personal.
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