Amani N. Shafik, Mostafa Mahmoud Khodeir y Mostafa S. Fadel
Antecedentes del estudio: Quimioterapia anticancerígena Los antibióticos antraciclínicos (ANT) se asocian con toxicidad cardíaca y renal que representa una complicación grave. En este estudio, se probó el efecto protector de los 2 betabloqueantes carvedilol y nebivolol en un modelo de rata de cardiotoxicidad y nefrotoxicidad inducidas por ANT mediante la administración intraperitoneal repetida de doxorrubicina (Dox). Métodos: Se utilizaron seis grupos de animales, cada uno de 8 ratas divididas como grupo de control: recibieron solución salina intraperitoneal cada dos días; control carvedilol: las ratas recibieron una dosis de carvedilol de 30 mg/kg/día por vía oral; control nebivolol: las ratas recibieron nebivolol 1 mg/kg/día por vía oral; doxorrubicina sola: se administró una dosis de 3 mg/kg/día por vía intraperitoneal cada dos días; doxorrubicina + carvedilol: carvedilol comenzó el mismo día con Dox; doxorrubicina + nebivolol: nebivolol comenzó el mismo día con Dox. Todas las sustancias se administraron durante 12 días. La detección y cuantificación del daño cardíaco y renal inducido por doxorrubicina y la acción terapéutica de los betabloqueantes se realizó mediante la técnica de Langendorff, exámenes de función ecocardiográfica, creatinina sérica, proteínas totales e histopatología. Resultados: La administración de doxorrubicina en dosis de 3 mg/kg/día durante 12 días produjo un deterioro cardíaco pronunciado, así como cambios nefrotóxicos renales. Se observó una reducción significativa de la doxocardiotoxicidad y la nefrotoxicidad en los animales tratados con nebivolol más que en los animales tratados con carvedilol. Conclusiones: La coadministración de carvedilol o nebivolol con doxorrubicina pudo mejorar hasta casi contradecir la lesión miocárdica inducida por doxorrubicina, la alteración de la filtración glomerular y el daño tubular renal con ventaja para nebivolol. Por lo tanto, pueden considerarse un candidato viable para proteger contra la nefrotoxicidad y la cardiotoxicidad que se encuentran comúnmente con el tratamiento con doxorrubicina.
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