María Cruz
Obtuvimos 62 informes completos distribuidos en 13 de las 17 áreas y dos comunidades autónomas de España. 32 de los participantes tenían un Equipo de Reacción Rápida (RRT) establecido. La frecuencia promedio en la detección de signos vitales fue de alrededor de una vez por turno, pero se consideraron frecuencias diferentes (48,4 %), generalmente basadas en criterios profesionales (69,4 %), ya que solo 12 (19,4 %) centros utilizaron Escalas de Advertencia Temprana (EWS) o advertencias automáticas sobre límites inusuales. En el ejemplo, los médicos, los cuidadores médicos (55 %) y otros profesionales de los servicios médicos (39 %) pudieron activar el RRT por teléfono, pero solo el 11,3 % del ejemplo lo autorizó ante los primeros signos de debilitamiento. Los profesionales de la unidad de respuesta a emergencias son los especialistas y asistentes médicos, que están disponibles todos los días la mayor parte del tiempo. En cuanto a la formación y capacitación del personal de sala general y de los individuos de la unidad de respuesta a emergencias, esta varía de nivel básico a nivel avanzado y específico, lo que reproduce un proceso educativo en desarrollo entre los miembros. Un número extraordinario de miembros tienen equipos de reanimación de emergencia (medicamentos, asistentes de ruta aérea y desfibriladores) en sus salas generales. En cuanto a la mejora de la calidad, solo el 50% del ejemplo incluyó pautas de acción de la unidad de respuesta a emergencias. En cuanto al uso de estrategias de comunicación y cooperación, la más utilizada es la entrevista clínica postoperatoria en 29 comunidades.
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